Independientemente de su tamaño, el fin de toda empresa es llevar a cabo la creación de valor económico. El valor económico se define como la diferencia que existe entre el valor percibido de un bien por parte del consumidor y el costo en el cual incurre el productor para llevar a cabo la creación dicho bien. Al momento de buscar llevar a cabo dentro de nuestras empresas resulta útil tomar en cuenta que requerimos de distintos recursos que nos permitan explotar determinada ventaja competitiva. Dentro de las distintas empresas que se encuentran en el mercado unas que resulta útil tomar en consideración son las pequeñas y medianas empresas. Este tipo de empresas son un gran motor de crecimiento para la economía nacional pues colaboran con una parte importante del PIB y, además, contribuyen con una parte significativa del empleo. Al momento de buscar impulsar a estas empresas resulta útil poner a su disposición determinados tipos de financiamientos que les permitan obtener los recursos que les permitirán llevar a cabo la creación de valor económico.
Dentro de los puntos que resulta útil que toda empresa tome en consideración, los más importantes son los siguientes:
Tipos de préstamos.- Existen distintos tipos de préstamos que podrían ser de utilidad para que las empresas obtengan los recursos que les permitan crear valor económico. Dentro de estos tipos de financiamiento, el arrendamiento financiero es uno de los más importantes. El arrendamiento financiero pondrá a disposición de las PyMEs determinado activo físico para llevar a cabo el proceso productivo de la misma. Este tipo de arrendamiento contiene una opción de compra al finalizar el plazo estipulado para el mismo que consiste en pagar el valor residual del activo y, así, obtener la propiedad de éste.
Plazo.- Otro punto importante a tomar en consideración es el plazo al cual solicitaremos los recursos, la mejor manera de determinar el plazo es a través de la proyección de nuestros flujos futuros esperados. Proyectar estos nos ayudará a conocer nuestra capacidad de pago y, como consecuencia, a elegir el plazo que mejor se ajuste a nuestros flujos.
Una vez que hemos tomado en cuenta los puntos anteriores, el siguiente paso será acercarnos a aquella institución financiera que ponga a nuestra disposición el arrendamiento financiero que necesitamos. Dentro de las distintas instituciones financieras que se encuentran en el mercado, las sociedades financieras son las que mejores términos y condiciones nos brindan en nuestros contratos de financiamiento.
