Las pequeñas y medianas empresas en México son un importante motor para el crecimiento y desarrollo económico del país. Éstas contribuyen con una importante parte del PIB y otorgan empleo a una fracción considerable de la población económicamente activa. Para lograr que la economía mexicana logre tasas de crecimiento con mayores niveles es necesario que impulsemos las PyMEs. Son diferentes las dificultades a las cuales se enfrentan las pequeñas y medianas empresas a lo largo de sus operaciones normales, identificar estas dificultades resulta crucial para trazar un plan de desarrollo completo para lograr que estas crezcan y se expandan. Dentro de las diferentes dificultades a las que se enfrentan las pequeñas y medianas empresas una que destaca por su importancia y por el impacto que tiene sobre el crecimiento de las pymes es el acceso limitado al crédito.
El limitado acceso al crédito al cual se enfrentan las pequeñas y medianas empresas hace que para estas resulte imposible invertir en capital humano e invertir en capital físico. Al no poder invertir en capital humano, los empleados de las PyMES no pueden desarrollar todo su potencial puesto que no cuentan con las herramientas necesarias para utilizar su capacidad al máximo. Es necesario que las personas que se encuentran al frente de las pequeñas y medianas empresas capaciten al personal que labora en ellas para que así pueda realizar su trabajo de la manera más profesional posible. Por otro lado tenemos que al no contar con suficiente acceso a los recursos resulta imposible para las PyMEs contar con el capital físico necesario para llevar a cabo los diferentes procesos que necesitan para su negocio. El limitado acceso al financiamiento se ve reflejado principalmente en la falta de inversión tanto de capital humano como de capital físico.
Debido a que las PyMEs se enfrentan a acceso limitado al financiamiento éstas se ven imposibilitadas para llevar a cabo proyectos de expansión y de crecimiento. Es por lo anterior que si realmente se quiere tener una economía nacional fuerte y estable se tienen que tomar diferentes medidas que beneficien a las pequeñas y medianas empresas ayudándolas a crecer obteniendo los recursos necesarios para desarrollar sus diferentes proyectos productivos. Una de las medidas que debería implementarse es la de desarrollar políticas que ayuden a poner en contacto los recursos superavitarios con personas que se encuentren al frente de las pequeñas y medianas empresas. Al ser las PyMEs empresas poco consolidadas muchas veces es difícil para ellas acceder a estos recursos dado el alto riesgo que representa prestarle dichos recursos a estas empresas, sin embargo y gracias al desarrollo que han existido en los últimos años en los mercados financieros hoy en día existen empresas serias y confiables que ponen a disposición de las pequeñas y medianas empresas los recursos necesarios para llevar a cabo el proyecto de expansión y crecimiento que tienen en mente.
Las empresas financieras mencionadas anteriormente brindan a las PyMEs opciones de financiamiento bastante atractivas otorgando las tasas de interés más bajas y los mejores términos y condiciones disponibles en el mercado. Dentro de las distintas opciones de financiamiento una que resulta ser bastante atractiva para invertir en capital humano y capital físico es el crédito. El crédito consiste en pedir prestada la cantidad de dinero necesaria para determinado proyecto comprometiéndose el prestatario a devolver la cantidad recibida en préstamo en un plazo determinado. Durante el tiempo que se tiene el crédito éste estará generando intereses por lo tanto hay que tener en cuenta que a mayor tiempo más costoso será el crédito sin embargo a menor tiempo las mensualidades serán más grandes. Elegir el plazo dependerá de los flujos y la estrategia de la PyME en cuestión lo importante es tener en cuenta que el crédito resulta ser una atractiva fuente de financiamiento para las PyMEs.
