Dentro de las prioridades para este sexenio que inicia el impulso a las pequeñas empresas debería ser una no tan solo para el gobierno sino para todas las personas comprometidas con el desarrollo de la nación de las personas. Es por esto que resulta primordial detectar las distintas áreas de oportunidad que destacan en estas pequeñas empresas. Dentro de las diferentes áreas de oportunidad que podemos encontrar en ellas están la flexibilidad, el talento y la innovación.
Detengámonos un momento a hablar sobre la flexibilidad. Al ser estas pequeñas empresas negocios que cuentan con un número pequeño de trabajadores y donde en la mayoría de los casos los dueños son personas que proceden del mismo núcleo los cambios y mejoras dentro de ellos se pueden realizar de manera casi inmediata. Esto resulta ser una ventaja competitiva pues tienen la capacidad de adaptarse de manera casi instantánea a las diferentes situaciones que va presentando el mercado en el que operan.
Por otro lado tenemos el talento, estas pequeñas empresas cuentan con una cantidad de personas talentosas que aún no han podido desarrollar sus capacidades al máximo por el hecho de no contar con las herramientas necesarias tanto para la labor que realizan como para adquirir nuevos conocimientos por medio de la capacitación. Para poder lograr impulsar las pequeñas empresas es necesario invertir recursos para poner a disposición del talento de las personas que integran estas empresas todo aquello que les ayude a su crecimiento profesional y a su perfeccionamiento como seres humanos.
Otra de las áreas de oportunidad que presentan las pequeñas empresas es la innovación. Al ser empresas en muchas ocasiones poco consolidadas y de reciente creación éstas son capaces de desarrollar sus productos o servicios de manera novedosa de tal forma que capten una mayor participación de mercado. Para lo anterior es necesario que aquellas personas que se encuentran al frente de estas empresas determinen cuales son los recursos económicos necesarios para llevar a cabo este tipo de proyectos y los obtengan de alguna manera.
Existen distintas maneras de obtener recursos económicos para llevar a cabo una estrategia de crecimiento para las pequeñas empresas sin embargo lo más común y fácil es hacerlo a través del préstamos por parte de instituciones financieras. Al hablar de instituciones financieras a uno se le viene a la mente inmediatamente los grandes bancos con sus columnas de mármol en la entrada sin embargo hoy en día existen un sinnúmero de instituciones financieras como alternativas al banco tradicional que brindan diferentes tipos de préstamos a pequeñas empresas con las tasas de interés más bajas y los mejores términos y condiciones en los contratos.
Al momento de acercarnos a estas alternativas de financiamiento es necesario tener claro para que destinaremos los recursos. Los dos tipos de préstamo más comunes para llevar a cabo un proyecto productivo dentro las pequeñas empresas son el crédito y el arrendamiento. Si el proyecto que determinamos requiere de liquidez para poder hacer pago para intangibles el préstamo más adecuado sería el crédito. Éste nos permite obtener los recursos necesarios para hacer frente a obligaciones que deben cubrirse de manera inmediata. Por otro lado si nuestro proyecto incluye la adquisición de activos tangibles que requerimos usar durante un tiempo determinado el préstamo que nos podría ayudar sería el arrendamiento. Este nos da la posibilidad de adquirir durante un tiempo determinado aquellos activos necesarios para llevar a cabo el proceso productivo de nuestra empresa. Al momento de trazar la estrategia de crecimiento es necesario considerar las distintos ventajas que nos presentan cada tipo de préstamo de esta manera lograremos que nuestra experiencia de inversión se realice de la manera más satisfactoria posible.
