Al momento de buscar llevar a cabo un proyecto productivo dentro de nuestra empresa es necesario tomar en cuenta que necesitaremos de recursos para poder concretar el mismo. Dentro de las diferentes formas de obtener los recursos que necesitamos para poner en marcha nuestro proyecto productivo las dos maneras más comunes de hacerlo es a través de los accionistas de la empresa o a través del financiamiento. Dado el contexto particular de nuestro país donde 9 de cada 10 empresas que operan se podrían clasificar como pequeñas y medianas empresas muchas veces estas no cuentan con la posibilidad de obtener los recursos de sus accionistas debido a que la mayoría de las veces dichas empresas tienen la característica de ser empresas familiares. Como resultado de lo anterior la manera más fácil y rápida de obtener los recursos que necesitamos es hacerlo a través del financiamiento. El financiamiento nos dará la posibilidad de llevar a cabo el proyecto que tenemos en mente con ayuda de recursos prestados que deberemos devolver en un plazo determinado.
Al momento de pensar en el financiamiento como opción para obtener los recursos que necesitamos para llevar a cabo el proyecto productivo que tenemos en mente es necesario considerar los tipos de financiamiento que podrían sernos de mayor utilidad. Dentro de los distintos tipos de financiamiento que se encuentran disponibles en el mercado financiero los dos que de mayor utilidad podrían sernos son el crédito y el arrendamiento.
Empecemos por hablar del crédito. El crédito consiste en pedir prestada la cantidad de dinero necesaria para poder solventar un gasto. La ventaja del crédito está en que nos otorga la liquidez que necesitamos para poder hacer frente a diferentes obligaciones que se nos podrían presentar al momento de llevar cabo la implementación de un proyecto productivo. Al momento de solicitar un crédito es necesario tener en cuenta nuestros flujos futuros esperados para poder determinar de esa manera cuáles serán nuestras posibilidades de pago. Tener claras nuestras posibilidades de pago nos ayudará a determinar el plazo durante el cual tendremos el crédito. El crédito usualmente se irá pagando a lo largo del plazo en mensualidades que consisten en una parte proporcional del capital acompañadas de una tasa de interés como reflejo del dinero en el tiempo. Al momento de tomar en cuenta el crédito debemos tener claro que el costo del mismo dependerá de la cantidad solicitada en préstamo y del tiempo durante el cual contemos con el mismo puesto que los intereses se generan conforme va avanzado el mismo.
El otro tipo de financiamiento que podría sernos de utilidad podría es el arrendamiento. El arrendamiento nos dará la posibilidad de pagar renta por utilizar un activo que necesitemos dentro de nuestro proceso productivo. Dentro de los tipos de arrendamientos que están disponibles en el mercado existe uno que es el arrendamiento financiero. El arrendamiento financiero funciona de manera similar que el arrendamiento con la característica que contiene una opción de compra al finalizar el plazo determinado para el mismo. La opción de compra consiste en pagar el valor residual del activo y adquirir la propiedad del mismo. La ventaja que nos podría presentar obtener los recursos físicos que necesitamos por medio del arrendamiento que hacerlo por algún otro tipo de financiamiento está en la posibilidad de mantener nuestro equipo actualizado pues contamos con la posibilidad de renovar el contrato de arrendamiento con un activo nuevo cada vez que venza el plazo del mismo. Al igual que en el crédito es necesario tener en cuenta nuestros flujos para poder determinar nuestra capacidad de pago. Elegir uno u otro dependerá de nuestras necesidades particulares.
