Al momento de requerir recursos es necesario explorar las distintas alternativas de financiamiento que existen en el mercado. Para poder llevar a cabo lo anterior es necesario determinar cuáles son los tipos de financiamiento que nos podrían ser de más ayuda para obtener los recursos que necesitamos. Dentro de los tipos de financiamiento que se encuentran disponibles en el mercado dos que nos podrían ser de gran utilidad para obtener los recursos que necesitamos son el crédito y el arrendamiento. Determinar las similitudes y las diferencias que nos ofrecen ambos será de gran ayuda para ver cuál es el tipo de financiamiento que más nos conviene en caso de necesitar ciertos recursos.
Entre los puntos a considerar, los que resultan más importantes son:
Finalidad.- Al momento de solicitar un financiamiento uno de los puntos más importantes a considerar es el uso que le daremos a los recursos. No es lo mismo requerir recursos para pagar por un servicio que requerir recursos para invertir en determinado activo físico. En el primer caso el tipo de financiamiento que nos podría ayudar es el crédito. En el caso de requerir determinado activo físico también podríamos utilizar el crédito sin embargo contamos con la opción de obtener el uso dicho activo por medio del arrendamiento. La diferencia en el punto anterior radicará en que mediante el arrendamiento no necesariamente adquirimos la propiedad de dicho activo.
Mensualidades.- Las mensualidades dependerán en gran medida del plazo que determinemos para nuestro financiamiento y de la tasa de interés del mismo. En el caso del crédito las mensualidades tienen que cubrir el total de los recursos recibidos en préstamo mientras que en el caso del arrendamiento las mensualidades únicamente deben cubrir la parte proporcional del valor del activo con respecto al tiempo durante el cual hubiésemos estado utilizando el mismo. Además de cubrir dichas cantidades la mensualidad incluirá unos intereses como reflejo del costo de oportunidad del dinero.
Beneficios fiscales.- Al momento de adquirir un bien por medio del crédito adquirimos la propiedad del mismo y por lo tanto debemos sujetarnos a las leyes de deducibilidad de activos. Por otro lado al contratar un arrendamiento estamos pagando por el uso del mismo y lo anterior podría ser enviado directamente a los gastos de producción.
Es importante considerar los puntos anteriores y tomarlos en cuenta al momento de contratar cualquiera de estos tipos de financiamientos a través de una sociedad financiera confiable.